lunes, 12 de noviembre de 2012

Cerro Quininí, aves de clima templado a menos de dos horas de Bogotá

Todo se cuadró de último minuto. Mi amigo Andrés no pudo ir porque se sentía mal de una pierna y se encontraba renco. El cupo estaba completo. Finalmente, iríamos Oswaldo, Pedro, Sergio, Alejandro y yo. La idea era salir de Bogotá a las cinco de la mañana para pajarear hasta después del medio día.
 
Pasados diez minutos de nuestro horario programado, tomamos la autopista sur hacia el suroccidente del departamento para buscar el municipio de Tibacuy y luego a la inspección de Cumaca. De ida llegamos hasta la glorieta que anuncia desvíos hacia Fusagasugá, Girardot y Tibacuy. Giramos a la derecha y transitamos por una carretera en aceptable estado parar llegar al municipio y luego buscar el sendero que conduce al Cerro. El retorno lo hicimos por el vecino municipio de Silvania por una carretera en mucho mejor estado. Recomiendo esta última ruta para ir y regresar al sitio desde Bogotá.
 
Después de dos horas de camino y algunos trancones en la carretera, estábamos un poco cansados y decidimos estirar las piernas. Elegimos el restaurante de doña Gladys, en Cumaca, para tomarnos un tinto y las acompañamos con unas deliciosas arepas de maíz blanco recién hechas (de aquellas que son imposibles no repetir).
 
Arrancamos nuestro camino pajareando por la ruta para subir al cerro. Al inicio es una carretera veredal con algunos bosques, cafetales y otros cultivos alrededor. En este sector vimos Azulejo común (Thraupis episcopus), Viuvá de antifaz (Pipraeidea melanonota), Cascabelito (Forpus conspicillatus) y el Arañero cabecirrufo (Basileuterus rufifrons), entre otros.
 
Basileuterus rufifrons
Basileuterus rufifrons
Continuando nuestro recorrido, se nos acercó un habitante de la zona a preguntarnos sobre el interés de nuestra visita a la vereda. Le contamos lo mismo de siempre y nos dijo lo frustrado que se sentía al ver como los cientos de turistas que visitan el cerro mensualmente, dejan basuras y abusan de la naturaleza presente. Al parecer la comunidad tiene ganas de asociarse para cuidar el sitio y regular un poco más la presencia y estadía en el cerro.
 
Entre excursiones de familias que subían y excursiones de colegio que bajaban, seguimos nuestra pajareada entre bosques un poco más densos y árboles más altos. De repente, en uno de estos árboles inmensos, vimos una tangara azul brillante con un antifaz negro revoloteando entre hojas verdes y ramas secas. Luego de una rápida confirmación en la guía, llegamos a la conclusión que se trataba del endémico Dacnis turquesa (Dacnis hartlaubi). Más adelante en un árbol de frutos morados y muy pequeños, tuvimos la alegría de volver a verlo mucho más cerca y con su hembra color café y amarillosa de intensos ojos color rojo.


Dacnis hartlaubi
Dacnis hartlaubi
Durante el camino de regreso hacia la entrada del sendero, vimos varias especies migratorias que pasaban su invierno en nuestros bosques de ladera. Discusiones alrededor de la especie de Contopus que veían mis compañeros más avezados, fueron la constante durante el camino de bajada. Yo mientras tanto disfrutaba de las Reinitas y Pirangas que adornaban el camino.


Era medio día y a pesar de que no habíamos almorzado, aún teníamos ganas de seguir pajareando en este clima templado y benevolente para las aves. Decidimos subir un poco más hasta llegar al bosque de neblina que circunda la punta del cerro. No pudimos. El estado de la carretera impidió nuestro ascenso pero no que siguiéramos pajareando. Dejamos el carro a un costado de la carretera y empezamos nuestro segundo recorrido.


Paisaje 3
Neblina alrededor de la punta del Cerro Quininí
La carretera estaba rodeada de bosques más conservados que los del camino tradicional y con menos pastizales e intervención humana. Seguidamente, vimos especies maravillosas a lo largo de este recorrido corto pero fructífero. Tangaras, colibríes, tiránidos, reinitas y más tangaras fueron las vedettes del espectáculo. Para resaltar dos especies muy bonitas: Hemithraupis guira y Lophotriccus pileatus.
 
Fue un día bastante largo y agotador pero lleno de alegría, aprendizaje y naturaleza. Con cuatro nuevas especies vistas, fue una jornada muy bonita que siempre recordaré y que me animará a regresar cada vez que tenga la oportunidad.
 
P.D.: el regreso es inminente pues no pude ver el hermoso Eubucco bourcierii que tantas ganas tenía de volver a disfrutar al inicio de este viaje.

 
Listado de aves registradas durante la pajareada (84 en total). Gracias a Sergio Chaparro por su colaboración en la actualización de la lista.
Bubulcus ibis
Coragyps atratus
Elanus leucurus
Rupornis magnirostris
Buteo platypterus
Columbina talpacoti
Zenaida auriculata
Forpus conspicillatus
Brotogeris jugularis
Piaya cayana
Crotophaga ani
Phaetohornis guy
Anthracothorax nigricollis
Chlorostilbon gibsoni
Amazilia cyanifrons
Amazilia tzacatl
Chalybura buffonii
Ocreatus underwoodii
Chaetocercus heliodor
Eubucco bourcierii (registro auditivo)
Melanerpes rubricapillus
Synallaxis brachyura
Synallaxis albescens
Xenops rutilans
Cranioleuca curtata
Lepidocolaptes souleyetii
Thamnophilus multistriatus (registro auditivo)
Myrmeciza longipes (registro auditivo)
Elaenia flavogaster
Phyllomyias griseiceps
Zimmerius chrysops
Phaeomyias murina
Tolmomyias sulphurescens
Lophotriccus pileatus
Todirostrum cinereum
Myiophobus flavicans
Sayornis nigricans
Contopus cooperi
Contopus sp.
Contopus virens (registro auditivo)
Myiozetetes cayanensis
Pitangus sulphuratus
Tyrannus melancholicus
Vireo leucophrys
Hylophilus flavipes (registro auditivo)
Hylophilus semibrunneus
Pygochelidon cyanoleuca
Troglodytes aedon
Henicorhina leucophrys (registro auditivo)
Campylorhynchus zonatus
Catharus ustulatus
Turdus ignobilis
Mimus gilvus
Ramphocelus dimidiatus
Thraupis episcopus
Thraupis palmarum
Pipraeidea melanonota
Tangara gyrola
Tangara vitriolina
Tangara cyanicollis
Tangara heinei
Dacnis hartlaubi
Hemithraupis guira
Piranga rubra
Coereba flaveola
Tiaris olivaceus
Zonotrichia capensis
Sicalis flaveola
Sporophila nigricollis
Sporophila minuta
Volatinia jacarina
Saltator striatipectus
Vermivora peregrina
Leiothlypis peregrina
Dendroica fusca
Oporornis philadelphia
Setophaga ruticilla
Parula pitiayumi
Mniotilta varia
Basileuterus rufifrons
Molothrus bonariensis
Astragalinus psaltria
Euphonia concinna
Euphonia laniirostris

No hay comentarios:

Publicar un comentario